DE VEZ EN CUANDO LA VIDA

Nuestra ilusión permanente de materializar un proyecto que casi exclusivamente incluya a GENTE LINDA parece otra vez materializarse en hechos concretos y la Escuela de Diseño nos da la oportunidad de reafirmar que nuestra propuesta no está transitando un camino errado.

Nuevamente un grupo de jóvenes y algunos no tan jóvenes, educados, respetuosos, con buen talante, con alegría, ocupan algunas de nuestras mesas, dotando a nuestra Cafetería de la savia nueva y la ilusión en un futuro, tan grande como el que intentamos poner cada día cuando abrimos las puertas.

Estamos contentos con su presencia, nos sentimos reconfortados, pensamos que más allá de la crisis hay esperanzas cuando los vemos llenos de ilusión en lo que estudian, en su conducta, en sus actitudes y eso nos llena de esperanzas, no de preparar un café más que eso es muy poco importante, sino en la ilusión que un mundo mejor es posible.

Nosotros hemos intentado apostar por esta clase de gente, y más allá de cualquier otra consideración sentimos que no nos hemos equivocado.

Bienvenidos cada día, nuestra casa tiene las puertas abiertas a sus inquietudes, nuestras paredes esperan sus fotos para exhibirlas, para que todos puedan disfrutar del arte, del empuje, de la vitalidad que puede dar la juventud, esa juventud que estudia, que se capacita, que se esfuerza para forjarse un futuro, más allá de los desastres que nuestra generación les pueda ofrecer.

Por todo esto y por mucho más nos sentimos agradecidos, ya que de vez en cuando la vida, nos regala situaciones como las que describimos, ya que de vez cuando la vida, toma con nosotros café.